A lo largo de la vida de las mujeres, sus pechos van variando de forma y tamaño dependiendo de la fase vital en la que se encuentran. Niñez, adolescencia, periodo premenstrual, embarazo, lactancia, adelgazamiento, aumento de peso… todos estos periodos conllevan variaciones en las mamas.

Cuando tenemos un exceso de volumen en las mamas puede que esto cause irritación de la piel debajo del pecho, sobrecarga muscular en la espalda, dolores en hombros e incluso en cuello, además de dificultar algunos movimientos cotidianos y la práctica de deporte. En esos casos, y siempre bajo supervisión de un cirujano, puede que sea recomendable reducir el tamaño de las mamas.

¿Cuándo está indicada esta cirugía?

Mamas muy grandes que ocasionan molestias posturales y dolor de espalda Pacientes con irritación constante de la piel debajo de la mama ocasionadas por el volumen del pecho.

Deseo de la paciente de tener un pecho más pequeño.

¿En qué consiste la cirugía?

La cirugía consiste en eliminar el exceso de piel, grasa y glándula mamaria a la vez que colocamos la areola y el pezón en su posición natural de acuerdo a la anatomía de la paciente.

Con esta cirugía no solo disminuimos el tamaño sino que logramos una colocación correcta y natural del pecho, a la vez que conseguimos un alivio en la paciente y un resultado mucho más estético.

La cirugía de reducción de pecho tiene una duración de aproximadamente 2,5-3 horas y se realiza bajo anestesia general, siendo necesaria una noche de hospitalización.

¿En qué consiste el post operatorio?

Tras la intervención, hay que permanecer una noche hospitalizada y llevar un vendaje durante 3-4 días hasta que realizamos la primera cura donde pondremos un sujetador deportivo 

El postoperatorio es muy bueno, ya que la cirugía de reducción de mama no provoca dolor.